Tratamiento periodontal: beneficios para tu salud
Tratamiento periodontal: beneficios para tu salud
Cuidar las encías no solo aporta importantes beneficios para la salud oral, sino que también presenta consecuencias positivas sobre la salud general. Por eso, el tratamiento periodontal se erige como un pilar esencial para garantizar una mejor salud global.
Las últimas encuestas sobre salud oral realizadas en nuestro país ponen de manifiesto que en España aproximadamente el 90% de la población mayor de 35 años presenta algún problema relacionado con las encías.
¿Qué son las enfermedades periodontales?
Las enfermedades periodontales son patologías infecciosas de origen bacteriano que afectan a los tejidos que rodean los dientes. Su origen es multifactorial, y en ellas también influyen factores genéticos, ambientales, locales…
La gingivitis y la periodontitis son las dos principales enfermedades periodontales. Cuando está únicamente afectada la encía, causando un proceso inflamatorio reversible, se denomina gingivitis; en el caso de la periodontitis, además de la inflamación de las encías, se produce una destrucción irreversible de los tejidos que dan soporte al diente poniendo en peligro su supervivencia.
¿Cómo se trata la enfermedad periodontal?
El principal objetivo del tratamiento periodontal es el mantenimiento a largo plazo de los dientes naturales en un estado saludable, funcional, estéticamente aceptable y sin dolor.
“El objetivo principal del tratamiento periodontal ya no es solo mantener los dientes a largo plazo, sino también prevenir eventos como el infarto agudo de miocardio”.
Francisco L. Mesa. Profesor titular de la Universidad Granada.
“La modificación de comportamientos y estilos de vida poco saludables son de gran relevancia en la prevención de la aparición o recidiva de la periodontitis, y conllevan indudables beneficios para la salud general”.
Silvia Roldán. Máster en Periodoncia en la Universidad Complutense de Madrid.
¿Qué consecuencias tiene la enfermedad periodontal?
Las enfermedades periodontales, además de las claras consecuencias que producen a nivel oral, también tienen repercusión a nivel sistémico; es decir, que sus consecuencias negativas pueden extenderse más allá de la boca y afectar a otras partes del organismo y potenciar o complicar otros trastornos tan frecuentes e importantes como la diabetes.
A nivel oral, el efecto más tangible de las enfermedades periodontales (y verdadero punto y final de esta enfermedad) es la pérdida dentaria, que puede conllevar problemas funcionales y estéticos importantes. Pero, además, estas enfermedades pueden cursar con sangrado, halitosis, recesión gingival, movilidad dentaria, dolor… que pueden afectar negativamente a la calidad de vida.
Los pacientes que reciben tratamiento periodontal pierden de media 0,1 dientes por persona/año frente a los 0,6 dientes por persona/año de aquellos que no reciben tratamiento.
¿Qué puede hacer por mí el tratamiento periodontal?
- Reduce el riesgo de pérdida de dientes naturales.
- Mejora la estética y la funcionalidad de los dientes y las encías.
- Reduce el sangrado, la movilidad dentaria y facilita el control de la halitosis.
- Es una medida más de prevención secundaria de enfermedades cardiovasculares.
- Facilita el control de la diabetes.
- Disminuye el riesgo de parto prematuro y de que el feto tenga un bajo peso al nacer.
Beneficios de un tratamiento periodontal
Uno de los principales beneficios del tratamiento periodontal a nivel oral es que evita la pérdida de dientes; de hecho, la evidencia científica disponible revela que esta terapia resulta predecible a la hora de reducir las tasas de “mortalidad” dentaria.
Y es que el principal objetivo del tratamiento periodontal es el mantenimiento a largo plazo de los dientes naturales en un estado saludable, funcional, estéticamente aceptable y sin dolor. Para ello, es prioritario detener el proceso de la enfermedad inflamatoria y controlar los posibles factores de riesgo asociados.
Los datos obtenidos en estudios recientes muestran que los pacientes que reciben tratamiento periodontal pierden de media 0,1 dientes por persona y año frente a los 0,6 dientes por persona y año que se produce en los pacientes que no reciben tratamiento. Eso sí, los resultados se obtienen y mantienen en el tiempo siempre y cuando el paciente reciba una adecuada y periódica terapia de mantenimiento.
El hecho de conseguir salud y buenos resultados a largo plazo va a permitir además que los pacientes puedan beneficiarse de todo el arsenal de tratamientos que los equipos multidisplinares pueden ofrecer hoy en día para conseguir una boca saludable, funcional y estética, mejorando así la calidad de vida.
Otro efecto beneficioso del tratamiento periodontal es su capacidad de producir mejoría de las distintas variables clínicas, lo que se traduce en ausencia de sangrado, menor movilidad dentaria y control de la halitosis.
Actualmente, como se ha publicado recientemente en un informe de la Sociedad Española de Periodoncia (SEPA), se estima que en un 90% de los casos de halitosis (mal aliento) el origen del mal olor está en la boca y en más de la mitad de estos casos (entorno al 60%) el problema está estrechamente vinculado con algún tipo de patología periodontal (gingivitis en un 30% y periodontitis en otro 30%).
En un 90% de los casos de halitosis (mal aliento), el origen del mal olor está en la boca y, en la mayor parte de ellos, el problema se asocia con una enfermedad periodontal.
¿El tratamiento periodontal también beneficia a la salud general?
En la actualidad, cada vez hay mas evidencia científica que pone de manifiesto las importantes vinculaciones entre salud periodontal y salud general.
Las repercusiones de la enfermedad periodontal a nivel sistémico se derivan, bien por la presencia de gran cantidad de bacterias a nivel subgingival que pueden producir un efecto directo, o bien por la inflamación sistémica que generan. Esto hace que las enfermedades de las encías puedan aumentar el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, de tener un parto prematuro o de que el feto registre un bajo peso al nacer o de producir descompensación de la diabetes, entre otros muchos efectos.
El tratamiento periodontal beneficia a las enfermedades cardiovasculares
La evidencia más reciente muestra como la periodontitis se relaciona de forma significativa e independiente con las enfermedades inflamatorias crónicas más comunes de la edad, entre las que se incluyen las enfermedades cardiovasculares. En este caso, el efecto beneficioso del tratamiento periodontal viene determinado por la reducción consistente y progresiva de la inflamación sistémica y una mejoría de la función endotelial, ambas asociadas a un riesgo incrementado de infarto de miocardio. A pesar de que todavía la evidencia es limitada sobre los efectos del tratamiento periodontal en la disminución del riesgo cardiovascular, parece que los datos disponibles sustentan la existencia de una relación causal entre ambas entidades. Es por ello por lo que debemos tener en cuenta la recomendación de la Asociación Americana de Cardiología, que aconseja el cuidado de las encías como una medida más de prevención secundaria de enfermedades cardiovasculares.
Una óptima salud de las encías previene futuras patologías a nivel oral y mejora la salud general.
El tratamiento periodontal beneficia a la diabetes
Otra enfermedad inflamatoria crónica con la que las enfermedades periodontales entablan una amistad peligrosa es la diabetes. En los últimos años se está constatando que la asociación entre estas dos enfermedades es bidireccional, lo que quiere decir que no solo la diabetes aumenta el riesgo de sufrir enfermedades periodontales, sino que también las enfermedades periodontales pueden empeorar el control de la glucemia en personas con diabetes.
En este caso, el tratamiento periodontal podría ser beneficioso a la hora de mejorar el control de la glucemia en las personas con diabetes. Según los últimos datos publicados al respecto, el tratamiento periodontal permite una mejora de los niveles de glucemia de 0,40% en personas con diabetes tipo 2 durante al menos tres meses tras la terapia. Además, otros estudios recientes muestran que después de realizar el raspado y alisado radicular se produce una disminución absoluta en los valores de hemoglobina glicosilada (HBA1c) del 0,4%. En base a esto, se asume ya que la salud bucal y la periodontal deben ser parte integrante del manejo de la diabetes.
El tratamiento periodontal beneficia en el embarazo
Por otro lado, en los últimos años se han llevado a cabo numerosos estudios de intervención para obtener una mayor evidencia sobre el posible papel de la periodontitis en los resultados adversos del embarazo. En la mayoría de estos estudios se constata que cuando la madre embarazada tiene una peor salud periodontal (sobre todo en los casos de periodontitis) existe un mayor riesgo de tener un parto prematuro.
La cuantificación de esta asociación entre enfermedad periodontal y parto prematuro es variable entre distintos estudios y poblaciones; en España, según los datos publicados, el riesgo de prematuridad es el doble en las mujeres con encías enfermas que en mujeres con las encías sanas.
Ahora se está investigando si el tratamiento de la periodontitis durante el embarazo puede reducir el riesgo de prematuridad. Por ahora, este punto no tiene confirmación de manera clara, pero sí se ha podido establecer que esta terapia es segura para la madre y para el feto durante el segundo trimestre del embarazo, mejorando de manera significativa la salud gingival de la madre.
En definitiva, una adecuada salud gingival conseguida con el tratamiento periodontal y la higiene bucal son fundamentales a la hora de prevenir futuras patologías a nivel oral; pero, además, en la actualidad se sabe que unas encías sanas producen una mejoría en la salud general.